Los buenos modales forman
parte de las normas de convivencia dentro de la sociedad. Por eso, es importante
que se enseñen normas de cortesía a los niños desde pequeños para
que sepan cuáles son los comportamientos adecuados según los diferentes
entornos y situaciones en las que se encuentren.
Los niños no nacen sabiendo
las normas de cortesía, ni buenos modales.
Conseguir que un niño sepa
utilizar los buenos modales no es cuestión de azar. Detrás de este logro
hay un importante trabajo por parte de la familia y de los
profesores.
Además de enseñar buenos
modales es importante que los niños los vayan poniendo en práctica en el día
a día.